Peraltilla

 Hola Peraltillenses y demás gentes que se sienten vinculadas con este pueblo del Somontano.

Hace unas semanas una amiga me propuso que escribiera algunas líneas sobre Peraltilla para el programa de fiestas; la idea era aportar una visión externa de alguien que sin ser hijo del pueblo sintiera apego por el pueblo. Pues bien, ha llegado el día de empezar a escribirlas y lo primero que me viene a la cabeza es lo difícil que resulta escribir cuando no se tiene por costumbre hacerlo; lo segundo que pienso es como enfocar el asunto para no molestar a nadie. No obstante creo que la vida es para experimentarla y hay que esforzarse por apartar los miedos y las vergüenzas, así que ya basta de excusas y a escribir se ha dicho.

Peraltilla se ha convertido en uno de los relojes de mi vida. Un reloj analógico, de los de antes de la era del todopoderoso teléfono móvil. Cierto es que no todos los años voy a los diferentes eventos que marcan los cuartos de este gran reloj, pero siempre estoy enterado gracias a la peña O'Rastrojo.

Primer Cuarto, Invierno:
Me gusta especialmente la cena de Invierno con motivo de la fiesta pequeña. Los años en los que fui, se hacían unas hogueras con cuyas brasas se asaban buenas chullas de carne y longanizas. Ver a todo el mundo ignorando el frio, y a veces hasta la lluvia, para disfrutar de la noche en buena compañía, es como un canto a la vida y a las ganas de disfrutarla a pesar de las dificultades y obstáculos

Segundo Cuarto, Primavera:
Cada año me gusta más la fiesta de la Plantada del Mallo que se celebra en Primavera, por el ambiente que reina y porque sientes el poder de las personas cuando colaboran juntos por un objetivo común. Este año asistí y me lleve la “sorpresa” que la tracción animal no era solo desde el barranco hasta el camino, sino que lo llevamos a lo animal hasta la plaza. Fue muy divertido, mi hombro todavía se ríe cuando lo recuerda.

Tercer Cuarto, Verano:
Las piscinas de Peraltilla son para mi familia todo un símbolo del Verano , de hecho mis hijos aprendieron a nadar en ellas. Las piscinas son el elemento salvador en los días de calor duro en que las chicharras no paran de cantar su canción, cuya letra debe ser algo así: “Que calor, que calor, yo también me pongo el bañador”. Es un gran placer disfrutar del agua y del césped bajo las sombras de los árboles, mientras se van acercando lentamente las fiestas de Verano. grandes fiestas, no tanto en mi opinión por los diferentes actos y orquestas que no son moco de pavo, sino por la actitud colectiva de colaboración y predisposición a la alegría de todo el mundo para que todo funcione. Y los huevos fritos, ah los huevos fritos al amanecer en honor a San Colesterol no tienen precio y algún día la Unesco los incluirá en su lista del Patrimonio de la Humanidad.

Cuarto Cuarto, Otoño:
Que raro, no recuerdo ningún evento especial durante el Otoño; voy a tener que visitar al médico para que me haga una revisión de la memoria pues ya me extraña que un pueblo con tantas ganas de vivir no encuentre un motivo que celebrar a lo largo de toda una estación.

Como despedida tengo que contaros una imagen que me vino a la cabeza casi desde el primer instante en que empecé y que creo ilustra de una manera simpática una característica de este pueblo. La imagen en cuestión es la última viñeta de los cómics de “Asterix y Obelix”, donde al final de cada aventura y a pesar de todas las vicisitudes se reúne toda la aldea para celebrar con una gran cena al aire libre el final de las peripecias .

Así pues, espero poder compartir con todos las fiestas de este año y muchas más. Aúpa Peraltilla.

 


Rubén González Malo
Agosto 2016